Como marcan nuestras reglas, en torno al último
domingo de octubre celebramos los cultos en honor a nuestra titular, María
Santísima del Mayor Dolor y Traspaso. En esta ocasión ha destacado el grandioso
altar de triduo montado por el equipo de priostía en el centro del cual
destacaba la imagen de la Santísima Virgen. El altar estaba exornado con azucenas
y rosas blancas, iluminado con cera blanca y exornado con credencias, bandejas
y candelabros y otras piezas en plata, como la miniatura de Nuestra Señora de
la Merced que fue colocada en sobre el manifestador, con motivo del año
dedicado a la Virgen de la Merced.
La imagen de la Virgen destacaba en el altar
luciendo su manto de terciopelo morado y como saya vestía la túnica de Nuestro Padre Jesús Nazareno, además estrenaba
un antiguo tocado de punto de aguja, obsequio de vestidores y camareras de
nuestra Hermandad. Durante el besamanos, la
Virgen estrenó un nuevo aderezo de cristal de roca y una antigua corona
seráfica (similar a un rosario) donada por doña Manuela Benítez Moreno.
Los cultos fueron predicados por nuestro director
espiritual don Francisco Suárez Salguero, quien basó su predicación en los tres
aspectos de la cita evangélica “amarás a Dios, con todo tu corazón, con todo tu
ser y con toda tu mente”.
El domingo por la tarde la Virgen quedó expuesta
de devotos besamanos y tras el cual, la imagen fue trasladada a la capilla de
Nuestro Padre Jesús por las hermanas de la Hermandad y las devotas de la Santísima
Virgen.
A continuación podrán ver algunas imágenes de los
cultos captadas por nuestros hermanos Juan José Moreno Jimenez y Jesús Vergara Falcón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario